Es probable que pienses que el minimalismo DEBE ser de tal o cual manera. Pero ponerle reglas y etiquetas a esta filosofía, es ir en contra de la misma.
El objetivo del minimalismo es darle sentido a nuestra vida. Y como cada vida es diferente, cada quien vivirá el minimalismo de manera diferente.
Sin embargo, creo que puede ser valioso compartir lo que -desde mi punto de vista- NO es minimalismo:
No es un estilo de decoración
Aunque el término nace del arte y la arquitectura, debemos entender que el minimalismo como filosofía de vida poco tiene que ver con tener una casa con paredes blancas y muebles de diseño. Tu casa puede lucir como gustes, siempre y cuando te sientas cómodo y feliz de habitar en ella.
No es vivir con 100 cosas
Algunos piensan que para ser minimalista debes tirar todo a la basura y quedarte con el mínimo de pertenencias. Aunque esto es posible, no es necesario para llevar una estilo de vida minimalista. Puedes tener la cantidad de pertenencias que quieras, siempre y cuando cada una de ellas tenga una verdadera razón para estar ahí.
No es dejar de comprar
Puedes ser minimalista y aún así seguir comprando cosas. La único que esta filosofía nos pide es cuestionar nuestros hábitos de consumo y evitar comprar por impulso. Puedes comprar un nuevo suéter, una nueva computadora o lo que quieras, mientras lo hagas de manera consciente, y verificando que tu compra realmente aporte algo positivo a tu vida.
No es una moda
Es cierto que el minimalismo ha tenido un auge en los últimos años (y confieso que yo lo adopté gracias a este auge). Sin embargo, considero importante aclarar que no se trata de una moda pasajera. La filosofía detrás del minimalismo lleva siglos de existencia y nace del Budismo. Además, a diferencia de otras tendencias, pienso que el minimalismo es algo que, una vez que lo adoptas, es casi imposible dar un paso atrás, simplemente porque vivir con esta filosofía se siente increíblemente bien.
No es un sacrificio
Muchas personas encuentran difícil desprenderse de objetos de valor sentimental o sienten que abandonar sus hábitos de consumo es imposible. El minimalismo para nada debe ser algo que nos haga sentir mal. Si piensas que el minimalismo no es para ti, seguramente es porque lo ves como un sacrificio, pero creo que adoptarlo poco a poco y a tu propio ritmo te ayudará a que cada vez te resulte más fácil vivir bajo esta filosofía.
Como decía San Fransisco de Asís » necesito pocas cosas,y las pocas cosas que necesito,las necesito poco »
Pienso que fue uno de los primeros minimalistas !
Me gustaMe gusta
¡Sabias palabras!
Me gustaMe gusta
Y tanta razón es este post.
A veces hace falta ver lo que una cosa no Es para entender lo que si Es.
Muchas gracias 🙂
Me gustaMe gusta